sábado, 19 de marzo de 2011

¿Siempre es lo mismo?





A las 7.15 suena el despertador, cada día, como el pan nuestro. La casa es chica así que el sol llega antes de que pueda abrir los ojos y me pega la luz como un antifacebook de molestia. Siempre es lo mismo. Enciendo el pucho, camino hasta el baño mientras me rasco los huevos y me toco un poco la polla que amanece como morcilla recién sacada de la parrilla; me olvido, siempre, de levantar la tabla del inodoro y la primera gota bautismal chorrea donde no debe; la vieja hace los mates y yo me como 5 tostadas con manteca y azúcar; suerte que ropa no uso porque soy Barney, y me alcanza con un chuff chuff de Axe Pedo de Hipopótamo (porque ya no saben qué inventar, y yo me compro el de la propaganda que está el chaboncito fachero en el zoológico y el hipopótamo le tira un pedo en la cara y salen todas las minas a abrazarlo), así salgo al balcón. Siempre es igual, todo… Y lo que me molesta es estar es esa incómoda situación de tener que elegir en base a cosas que son diferentes. Todo es diferente: los trabajos, las minas, las verduras. Entonces ahí estoy yo eligiendo entre dos tomates con el mismo aspecto pero totalmente diferentes. Miro por el balcón, la cantidad de autos, colores, sonidos, gente y todo es diferente y no puedo elegir nada, entre un chino y otro chino sería igual de difícil porque uno tendría más olor a ajo que el otro. La vida es compleja porque todo es diferente y siempre es lo mismo, nena.

Por otro lado, todas las mañana son iguales. Una rutina que repito como hernia de disco rayado, que me sé de memoria, que puedo hacer sin pensar, con los ojos cerrados, y que no tengo que elegir si hoy meo apenas me levanto o si primero desayuno. El hábito que hace al pepe monje es un plan infinito sin alteraciones, primero lo que siempre hago primero, ¿por qué dudar?. Pero en el micro cosmos de la IGUALDAD hay un sin fin de cosas que son todas diferentes, como por ejemplo, el color y el olor de ese pis, cada día es diferente, pero siempre, invariablemente es pis.

En el macro cosmos veo la DIFERENCIA pero en el micro cosmos veo la IGUALDAD. Me encuentro con que todo lo que es igual es diferente y que no hay forma de que lo diferente sea igual. Me encuentro en un laberinto de la pelotudes, yo y mi existencialismo del orto que me achicharra la cabeza al pedo, porque diganmé

¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE PENSAR Y NO PENSAR?

Y debo elegir: ¿pienso o no pienso?

¿Soy igual a lo diferente? ¿Soy diferente a los iguales? ¿Yo soy Barni o Barni soy él?









 



(©Material registrado en D.N.D.A.)
Fotografía: Belén Palacios

1 comentario:

  1. "...por que yo no tengo nada,
    pero sí tengo algo que sobra y que es lindo
    es música, música, siempre sí..."
    Pappo.
    Tengo un poquito de cada cosa, y mucho de miserable.
    Sobrevivo intentado el truco de no pensar.
    Fluir, pero esquivando carceles y Psiquiatras.
    Estoy como todos, JODIDO.
    Salud!

    EmilCE

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